Por Aurelio Nicolella
Es verdad que el Presidente pueda tener un ochenta y cinco por ciento (85%) de imagen positiva, también la tuvo el genocida de Leopoldo Fortunato Galtieri aquel 1982 de la Plaza y sabemos lo que paso. Es típico en la sociología argentina el famoso triunfalismo que luego termina en el fracaso y la decepción. Es triste que el gobierno caiga en el barato populismo, y que la oposición para no perder sus privilegios en esta crisis calle.
Todos sabemos no hace falta saber economía que el gobierno está bancando todo este desastre con la maquinita, se le va a fundir y cuando termine la pandemia va a quedar una crisis económica que va a producir más pobreza y miseria.
Con impuestos altos, gasto político y público altísimo, un Estado gigante empleador deficitario que necesita deuda o emisión monetaria para subsistir, así no hay economía que aguante ni empresario mediano o bajo que pueda seguir adelante.
¿Por qué no se baja impuestos?; ¿Por qué no se ayuda a los privados?; ¿Por qué no se da seguridad jurídica para inversores que dan empleo y ahorro?; y ¿Por qué no se baja el gasto político, sueldos y jubilaciones de políticos argentino. Esos recursos debe saber el Presidente, que se pueden destinar en su mayoría a la Salud Pública para luchar todo este año contra la Pandemia.
Desde hace décadas el Estado argentino es asfixiante, porque mata el empleo privado y esa receta no funciona en el mundo desarrollado y menos funciona en países en vías de desarrollo.
Hoy la medida madre sería reducir el cincuenta por ciento (50%) los salarios de funcionarios y "ñoquis", hay que ser duros con el gasto público en épocas de crisis sean estas económicas o sanitarias
La premisa del gobierno, ¿Ganar menos los empresarios? Si, Coca Cola y las megaempresas lo pueden hacer, cierto, pero al país lo mantienen las pequeñas empresas, comercios, profesionales etc… Ignorar esto no tiene sustento en absoluto.
El presidente sigue gobernando para la clase baja, no lo veo mal son parte del país y la que más sufre, pero el miedo es que si lo hace (gobernar) para sus votantes, sabemos los que estudiamos la historia argentina que a veces los gobiernos cuidan sus quintitas, pero ¿Qué pasa con la clase media?, no se ve de parte del gobierno medida alguna que contribuya a mejorar esa clase media. ¿No lo están asesorando mal?; ¿Creerá en la lucha de clases?; Presidente Alberto hay que cambiar el discurso, los que dan trabajo no son miserables, son personas que apuestan al país.
Este país lo hicieron grande los trabajadores de la clase media, a la que Ud. pertenece, y también la actividad privada o sea las empresas, y que las medidas de estas semanas las está destruyendo.
¿Pensó el gobierno los que se van a morir después que esta “Pandemia”?, que finalizara mágicamente, tendremos una economía destruida y ello por la falta de trabajo, la rueda con sus engranajes de una economía tarda en ponerse de nuevo en marcha.
Los que tienen que ganar menos son los políticos, los sindicalistas y los empleados públicos que cobran fortunas, ellos sí que no reportan NADA.
No se trata de que los empresarios no se puedan comprar el último Mercedes Benz. Se trata que las empresas les vaya fantástico en Argentina, mientras mejor le vaya a nuestras empresas mejor para todos. Empresas que ganan menos son empresas que recortan, empresas que no reinvierten, empresas que no se expanden, empresas que consumen menos insumos, empresas que no toman personal.
Como se dijo: “La economía y la salud no compiten, cooperan. No se mejora una al resignar la otra. Con una mejor economía, hay mejor salud. Con una crisis económica, hay crisis de salud”
El costo económico va a ser peor que la crisis sanitaria. No se puede dividir una crisis integral solo pensando en una parte de la misma.
La pandemia económica provocará casi el ajuste que quiere el Fondo Monetario Internacional (F.M.I.), solo que el Estado va a seguir gastando y emitiendo. Caerá la recaudación estrepitosamente a términos tales que estamos ante una pandemia económica y financiera (una recesión con mayúsculas) y una crisis social que obligará a toma o tomar decisiones como de achicar sueldos del Estado, jubilaciones muy altas de privilegio, eliminar áreas del estado y cerrar oficinas y dejar de gastar en "cortesía y homenajes", viáticos, pasajes, publicidad y fiestas y jodas , achicar el servicio exterior y posponer obras públicas. Muy fea y comprometida la situación futura... no hay que dar cheque en blanco a nadie...
Un consejo Señor Presidente: "no haga populismo, en tiempos de pandemia” el costo político a la larga es alto.
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