Por Aurelio Nicolella
La era Donald John Trump comenzó, esperanza para una gran parte del pueblo estadounidense, pero para los 120 millones de mexicanos es como decirle a un paciente que tiene una enfermedad y que no se sabe el final.
La política proteccionista que intenta instalar Trump en el país que hoy gobierna, al que más perjudica es a México, el país más poblado de habla castellana ya había empezado mal el año, el famoso “gasolinazo” crispo a todos, porque al subir el combustible hizo sentir el malestar en la población, revueltas y manifestaciones se produjeron en todo el país. El peso mexicano es el más devaluado de toda la región, la inflación se ha disparado en estas semanas de enero, y el desempleo aunque no hay cifras precisas ha aumentado.
Volviendo a Trump, el hecho que con sus palabras forzara a la multinacional Ford Motors Company a desistir de emprender la construcción de una planta automotriz en Hermosillo, fue la primera muestra que las relaciones bilaterales entre México y EE.UU. no serán iguales bajo la era Trump. A nadie escapa que son miles de puestos de trabajo que ya no existirán. Enrique Peña Nieto, que muchos analistas políticos se preguntan al día de hoy como llego a la presidencia de México, tiene esperanzas que las palabras de Trump queden en palabras y en los hechos la relación aunque sea distinta sea lo menos traumática para los dos años de gobierno que aún le queda como presidente mexicano y residente del Palacio de Los Pinos.
El jefe de estado mexicano manifestó ha puesto todas sus cartas en su canciller Luis Videgaray. Peña Nieto lo designo en el cargo de la Secretaría de Relaciones Exteriores desde el 4 de enero de este año 2017, le tiene plena confianza tanto es asi que desde que asumiera la presidencia a Videgaray lo había designado en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, pero no es solo por su carrera política que Peña nieto apuesta por él, el que mejor llegada tiene con el presidente estadounidenses por la relación de amistad íntima que este mantiene con el yerno de Donald J. Trump, Jared Kushner quien ha sido designado el 20 de enero por su suegro como Consejero Superior del Presidente, lo que significa estar Oficina Ejecutiva del Presidente de los Estados Unidos, realmente como decir “la mesa chica” donde se cocina toda la política estadounidense.
Por ello en el palacio Nacional en la Plaza del Zócalo (Ciudad de México), afirman que "el destino de México se define en los próximos 45 días y está en manos de Videgaray".
En el entorno presidencial se dice que se debe al canciller mexicano que el sábado 21 de enero en horas de la mañana a pocas de asumir Trump el ejecutivo estadounidense hablara con peña Nieto y concretaran una cita para que ambos mandatarios se vean el 31 de enero.
En el entorno presidencial se dice que se debe al canciller mexicano que el sábado 21 de enero en horas de la mañana a pocas de asumir Trump el ejecutivo estadounidense hablara con peña Nieto y concretaran una cita para que ambos mandatarios se vean el 31 de enero.
La oposición ya le está exigiendo al Peña Nieto que sea enérgico, el ex presidente Vicente Fox ha manifestado que de ese diálogo mantenga una posición de "cero concesiones" hacia Donald J. Trump. Es que todavía está en las mentes de políticos y del pueblo mexicano las palabras de Trump durante la campaña electoral con discursos con eje en México amenazando con enviar a su país, México, a "criminales" y "violadores"; incluso hay dicho abiertamente “México no es nuestro amigo”; México y los mexicanos serán el chivo expiatorio de las políticas de Donald J. Trump, porque muchos apuestas revive el presidente estadounidense la grandeza del pueblo y las políticas de racismo al mejor estilo hitleriano.
Mientras tanto el país azteca, continua dependiendo de políticas y planteamientos económicos que se desarrollan fuera de sus fronteras pero que sus consecuencias si repercuten dentro de las mismas.
Viene a la memoria la frase del académico mexicano Nemesio García Naranjo “Pobre de México tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos”, una sentencia que en estos tiempos parece recobrar fuerza.
